Actualizado en
24 agosto, 2017
Ejemplos de negligencia en enfermería
Al igual que con cualquier profesional de la salud, las enfermeras corren el riesgo de ser demandadas cuando el paciente está bajo su cuidado. La situación de una enfermera con una demanda por negligencia es muy similar a la de un médico siendo demandado por mala praxis. Sin embargo, debido a que su ámbito de acción es diferente al de un doctor en medicina, el término utilizado es la negligencia y la definición varía ligeramente.
Las enfermeras están protegidas por muchas leyes, pero los actos simples de negligencia no pasan desapercibidos y son a menudo revisados en un sentido legal. Como principio básico de la ley, la responsabilidad puede ser anulada, pero la negligencia no.
Definición de negligencia
La negligencia se refiere al acto de hacer algo o abstenerse de hacer algo que ningún otro profesional médico razonable haría o dejaría de hacer en una situación similar. No hace falta decir que cada situación es diferente, y es ahí donde la ley se convierte en algo difuso. Sin embargo, al revisar un caso de negligencia de enfermería, las hipótesis y la evidencia circunstancial se tienen en cuenta para determinar si hubo negligencia.
Ejemplos
Los ejemplos más comunes de negligencia en enfermería incluyen la desnutrición, la hidratación inadecuada, el abuso físico, los errores de medicación y abuso mental y emocional. En los hogares de ancianos u otros centros de atención a largo plazo, también hay a menudo lesiones por decúbito, infecciones y caídas. Los casos de desnutrición y deshidratación son causados por dejar al paciente desatendido durante demasiado tiempo, hacer caso omiso de sus necesidades o simplemente negándose a alimentarlo y suministrarle agua. El abuso puede presentarse en una variedad de formas y, en muchos casos, las enfermeras no creen que serán reportadas, sobre todo si el paciente está mentalmente discapacitado. Los errores de medicación, úlceras de decúbito, infecciones y caídas son los resultados más frecuentes de descuido y falta de atención a los pacientes como es debido.
Pruebas
La revisión judicial de un caso de negligencia de enfermería requiere pruebas de que el daño se hizo y de que fue el resultado de la atención de la enfermera o su falta. Hay cinco elementos principales en un caso de negligencia de enfermería y todos los elementos deben ser probados para que un caso tenga validez. Si uno o más de los elementos no está presente, el caso puede ser difícil de argumentar: (1) la enfermera estaba en funciones, (2) la atención adecuada era aparente en la situación, (3) se produjo una infracción o violación de la atención, (4) se produjo un daño demostrado que fue resultado de la negligencia de la enfermera, y (5) hay prueba de que los daños se produjeron como consecuencia directa de la situación.
Evitar la negligencia
Es importante que las enfermeras documenten sus acciones muy de cerca y con precisión en el momento, ya que a veces los casos de negligencia ocurren más tarde, cuando los detalles son difíciles de recordar. Registrar todo hace que sea más fácil determinar los detalles que rodean cada acción o falta de acción y de encontrar una razón lógica de por qué se hizo. Ésto, en combinación con una enfermera que sigue una práctica adecuada, probablemente evite que una enfermera sea procesada por negligencia de enfermería.
Protegerte
Si crees que eres o has sido víctima de negligencia de enfermería, puedes ser capaz de presentar una demanda. Ponte en contacto con un bufete de abogados si consideras que tienes un caso, presenta los hechos, y ellos te notificarán si creen que pueden ayudarte. Puede ser difícil llevar adelante un caso de negligencia de enfermería, ya que están protegidas en casi todo lo que hacen, siempre que esté dentro de su ámbito de acción. Ésto no quiere decir, sin embargo, que no debes tratar de iniciar un procedimiento si algo te sucediera como resultado directo de la interacción de una enfermera contigo.
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