Caminar es una manera de mantenerse activo, aumentar la fuerza muscular en las piernas y mejorar tu salud cardíaca. El dolor en las caderas o en la pelvis después de largos períodos de caminar puede ser un signo de una lesión o una condición médica subyacente. Comprender las posibles causas del dolor en la cadera te ayudará a seguir los tratamientos adecuados.

Osteoartritis

Una posible causa de dolor en la cadera después de largos períodos de caminatas puede estar relacionado con la osteoartritis. Según la Clínica Mayo, la osteoartritis es causada por la degradación del cartílago en una articulación, lo que puede resultar en inflamación y dolor en el área afectada. Las articulaciones de la cadera también son susceptibles al desarrollo de esta enfermedad con el tiempo, que puede ser bastante debilitante durante períodos prolongados de actividad en la articulación de dicho lugar.

Lesión muscular

Otra posible causa de dolor en la cadera durante largos períodos de caminatas puede deberse a una lesión en los músculos circundantes. De acuerdo con el sitio web The Pain Clinic, caminar incorpora a numerosos grupos musculares del cuerpo inferior para ayudar a su paso a través de la elevación y el descenso de las piernas. Una distensión muscular o un desgarro en cualquiera de estos grupos puede causar una cantidad considerable de dolor en las caderas. Los músculos también pueden producir dolor o fatiga después de largos períodos de uso.

Bursitis y tendinitis

La inflamación de la bursa -o sacos llenos de líquido que ayudan a lubricar las articulaciones- también puede causar dolor en la cadera después de largos períodos de caminatas. Según MedlinePlus, la fricción repetida de una bursa inflamada puede conducir a la bursitis -una condición dolorosa que puede empeorar si no se trata. La tendinitis es la inflamación de los tendones musculares, y también puede causar mucho dolor durante las contracciones repetidas de los músculos afectados en la zona de la cadera.

Consideraciones

Si comienzas a sentir dolor en las caderas al caminar, para y descansa durante unos minutos para permitir que tus músculos se calmen y bajen los niveles de ácido láctico. Si el dolor persiste durante un período prolongado, esto puede ser una señal de una lesión o una condición médica. Habla con tu médico sobre las opciones de tratamiento.