Actualizado en
18 julio, 2017
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Ejercicio y dolor en el empeine del pie
El dolor del empeine del pie puede ser una lesión que debilite a los atletas, personas mayores o cualquiera que tenga una estructura del pie desequilibrada. Puede ser provocado por muchas causas como el exceso de ejercicio, mantenerse mucho tiempo de pie o pronación superior.
Dolor de empeine
La sensación de dolor, pie dolorido o dolor de empeine se refiere a una inflamación y una sensación de ardor en el empeine del pie. Esta inflamación se debe a un estiramiento excesivo del tejido fibroso que se ubica en la superficie inferior del pie denominada fascia plantar. Fascitis plantar es el término que se utiliza para esta condición y describe la inflamación de la planta, músculos o ligamentos en el fondo del pie, causando así dolor en el talón y en el empeine del pie.
Ejercicios
El dolor de empeine tiene lugar cuando la fascia plantar se gasta debido a la constante presión o el ejercicio excesivo. Esto puede ocurrir por aumentar tu corrida o correr muchas millas demasiado rápido, utilizar el calzado inadecuado, poco estiramiento, correr cuesta arriba, mantenerse de pie por mucho tiempo o anatomía anormal tal como el pie plano. El estiramiento es un ejercicio importante que no debe ser desestimado ya que la opresión o falta de opresión en las articulaciones del pie también pueden causar dolor en el empeine.
Tratamiento
Descansar y poner hielo en el área inflamada son buenas formas de realizar un tratamiento en casa para un dolor de empeine leve. Los anti-inflamatorios también se pueden aplicar a esta área. Es importante reducir tu actividad para evitar empeorar el dolor del empeine. Utilizar zapatos apropiados que calcen bien es igual de importante. Asegúrate de usar zapatos diseñados con el soporte adecuado de empeine para evitar la pronación superior. A la hora de correr, evita las superficies irregulares, ya que esto contribuye al dolor de empeine. Además, almohadillas ortopédicas u otras almohadillas para el talón o dispositivos que puedan ser colocados en los zapatos para hacer de soporte y prevenir más torceduras en el pie.
Rehabilitación
La flexibilidad es importante a la hora de prevenir lesiones. Con un simple ejercicio de estiramiento, puedes rehabilitar los músculos de tu pie o aliviar el dolor de tu empeine y prevenir futuras lesiones. Este ejercicio simple de Tammy White y Phyllis Clapis para Relay Health es una buena manera de fortalecer los músculos de tu pie y estirar tu fascia plantar. Siéntate en una silla y cruza un pie sobre tu otra rodilla. Sujeta la base de tus dedos y empújalos hacia atrás hacia tu pierna hasta que te sientas cómodo estirándolos. Aguanta 15 segundos y repítelo tres veces. Cuando puedas pararte cómodo sobre tu pie lesionado, puedes comenzar parándote para estirar la fascia plantar en la parte de abajo del pie.
Ayuda médica
Considera buscar ayuda médica cuando el dolor comienza a empeorar o interfiere con tu trabajo o tus actividades diarias. Si el dolor es recurrente y el área comienza a presentarse muy sensible al tacto, busca la ayuda de un profesional médico para un tratamiento adecuado.
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