Al ser unas de las articulaciones más grandes del cuerpo, soportando la mayoría del peso de tu cuerpo, tus rodillas son propensas a sufrir daños. Algunas condiciones de salud o movimientos repetidos del trabajo o de los deportes y algunas lesiones pueden llevar a tener dolor de rodilla. Algunas causas de este dolor pueden solventarse con cuidados básicos en casa, mientras que otros requieren tratamientos más complejos y cambios en el estilo de vida. Si experimentas dolor severo en la rodilla o hinchazón, o no puedes caminar, consulta a tu médico inmediatamente.

Posibles causas

Una causa de dolor de rodillas es la artritis, la cual sucede cuando los cartílagos de la rodilla se rompen, dejando que los huesos de la pierna estén en contacto y se rocen con el movimiento. Tu riesgo de artritis es mayor si te has lesionado la rodilla previamente, si tus rodillas están sometidas a tensión repetitiva o si tienes sobrepeso. Otra posible causa, bursitis, sucede cuando los sacos de fluidos que ayudan a tus rodillas a moverse suavemente están inflamados. Aunque la artritis puede causar esto, también puede hacerlo la sobreutilización, el trauma y la infección. Un esguince, o un daño menor en un ligamento, por un trauma repentino como el giro de la rodilla puede causar dolor de rodilla, también. Dolor encima o debajo de la rótula puede deberse a una tendinitis.

Síntomas

El dolor de rodilla y el agarrotamiento, particularmente en la mañana, caracterizan la artritis de la rodilla. La hinchazón, el calor y el enrojecimiento también están entre los síntomas. La bursitis de rodilla muestra los mismos síntomas, pero podría doler más cuando aplicas presión, por ejemplo cuando te arrodillas. El dolor de bursitis sucede normalmente en la parte superior de la rótula. Los esguinces, también pueden causar dolor, hinchazón y calor, pero es más probable que produzcan magulladuras que enrojecimiento. La tendinitis podrían causar hinchazón, enrojecimiento y dolor que empeora con el movimiento, como por ejemplo al ponerte de cuclillas.

Tratamiento

La artritis, la bursitis y las torceduras causan todas síntomas similares, por lo que necesitarás ayuda profesional para determinar el diagnóstico. La bursitis, los esguinces y la tendinitis podrían necesitar descanso y mantener la rodilla elevada así como la aplicación de frío o calor. Algunos casos podrían requerir entablillado o venda elástica para sujeción e inmovilización de la rodilla. Las causas de la artritis no son siempre curables, por lo que el tratamiento se enfoca en reducir el dolor y mantener la movilidad. Tu centro de salud podría recomendarte aeróbicos de bajo impacto y ejercicios de flexibilidad y, en algunos casos, medicación.

Prevención

Reduce el riesgo de bursitis, tendinitis y esguinces variando tu rutina de ejercicios e incluyendo ejercicios de bajo impacto como la natación o el ciclismo. De esta forma no proviocarás tensión sobre tu rodilla con cada entrenamiento. Gradualmente aumentar tu fuerza y tu flexibilidad antes de empezar una nueva actividad puede también ayudar a prevenir daño en la rodilla. Usa parches en la rodilla si te arrodillas con frecuencia y suspensores de rodilla para actividades que las presionen. Protegerlas y mantener un peso saludable podría también reducir el riesgo de algunos tipos de artritis.