El consumo de alimentos con azúcar pretende ser una experiencia agradable, pero si te duele el estómago cada vez que comes azúcar, puedes comenzar a tratar de evitarlo. El dolor de estómago por comer azúcar está más probablemente relacionado con la intolerancia a la fructosa (el azúcar derivada de la fruta) y es una condición que se hereda cuando el cuerpo carece de las enzimas apropiadas y las proteínas utilizadas para digerirla adecuadamente, de acuerdo con Medline Plus. Habla con tu médico antes de modificar tu dieta para tratar una enfermedad.

Causa

Si eres intolerante a la fructosa, tu cuerpo carece de la enzima aldolasa B utilizada para descomponerla. Cuando comes alimentos que contienen fructosa, tu cuerpo no puede convertir el azúcar en glucosa, un azúcar mucho más fácil de digerir. Esta insuficiencia hace que tu presión arterial baje, lo que lleva a una acumulación de sustancias en el hígado. Medline Plus afirma que si ambos padres tienen el gen anormal relacionado con esta condición, sus hijos tendrán una posibilidad del 25 por ciento de padecer este trastorno.

Síntomas

Los primeros síntomas de intolerancia a la fructosa incluyen irritabilidad, letargo, aumento de peso, convulsiones, piel amarillenta, dolor de estómago, vómitos, somnolencia y problemas después de consumir productos que contengan fructosa, de acuerdo con Medline Plus. El American College of Gastroenterology establece que algunas intolerancias alimentarias también pueden causar hinchazón, gases, diarrea, náuseas, calambres y dolor de estómago.

Evitar

La Mayo Clinic recomienda evitar todos los alimentos que contengan fructosa si experimentas dolor en el estómago después de comer azúcar. La fructosa puede ser difícil de evitar, ya que se encuentra en muchos productos preenvasados​​, tales como miel, jarabes, panes y frutas. La fructosa es uno de los principales componentes del azúcar de mesa, o la sacarosa. También debes evitar el sorbitol, ya que se convierte en fructosa durante la digestión. Evita el jarabe de maíz de fructosa alta, la fructosa, el azúcar de confitería, la miel, los jugos de frutas, el azúcar de mesa, las bebidas para deportistas, las bebidas gaseosas y la leche azucarada.

Complicaciones

Esta condición, cuando no se diagnostica ni se trata, puede causar complicaciones graves como hemorragias, gota, muerte, insuficiencia hepática, bajo azúcar en sangre, enfermedad y una aversión a los alimentos que contienen este azúcar, de acuerdo con Medline Plus. También puedes llegar a convertirte en desnutrido si la condición no es tratada y continúas comiendo alimentos con fructosa. Habla con tu médico si tu hijo presenta signos de esta condición una vez que comienza a comer alimentos sólidos.

Advertencia

Si la afección ocasiona vómitos o diarrea, corres el riesgo de deshidratarte. La deshidratación es un trastorno grave que se puede prevenir mediante el aumento de la ingesta de líquidos. Evita las bebidas que contienen alcohol, cafeína o tienen alto contenido de azúcar.