Actualizado en
23 mayo, 2018
¿Cuáles son los peligros del gas helio?
El helio es un elemento inerte de tipo gaseoso que es más ligero que el aire. El helio es el segundo elemento más común en el universo y es posible encontrar trazas de él en la sangre humana. Su símbolo en la tabla periódica es He.
Durante años se ha usado para inflar globos en fiestas y eventos recreativos, dado que su menor densidad hace que estos se “eleven” en el aire si llegan a soltarse.
Sin embargo, también apareció una costumbre, incluso reflejada a manera cómica en el cine y la televisión, en la que algunas personas llegan a aspirar gas helio directamente de la boquilla de una bombona o de un globo lleno de este gas, para divertirse con el cambio en el tono de voz que provoca al pasar este gas, de menor densidad que el aire normal, por las cuerdas vocales.
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Esta voz es muy similar a la del conocidísimo personaje de tiras cómicas “Pato Donald”.
Aunque las hojas de datos de seguridad de materiales usados en la industria mundial colocan a este gas como un elemento no tóxico para el organismo humano, aspirar gas helio de manera abusiva puede conllevar ciertos peligros que no deben ser ignorados.
Asfixia
Al aspirar gas helio, el oxígeno de tu sangre y pulmones es reemplazado por este elemento.
Esto ocasiona el agotamiento del oxígeno que es portado por los glóbulos rojos de la sangre hacia los tejidos y que estos recogen en los pulmones, a donde llegan portando el dióxido de carbono producido por el metabolismo humano.
Por lo tanto, la aspiración repetitiva y en grandes cantidades de helio puede llevar a que la persona sufra un cuadro de asfixia, sufriendo mareos y desmayos.
En ese momento se debe detener la inhalación de helio para que el cuerpo vuelva a recibir oxígeno y se pueda recuperar.
No hacerlo expondría a órganos vitales como el cerebro a una asfixia masiva de sus células, lo que pondría al individuo en riesgo de muerte o lesiones cerebrales incapacitantes.
De hecho, han habido varios informes documentados de personas que han muerto debido al exceso de exposición al helio.
Además, el helio puede causar daños graves en la laringe si se aspira en exceso, pues hace que la vibración de las cuerdas vocales sea mucho más alta e irrita esta estructura, o incluso puede provocar daños permanentes en la voz de la persona.
Caídas
Una de las lesiones más comúnmente reportadas asociadas con la inhalación del helio ocurre cuando el cuerpo pierde el conocimiento o se desmaya después de sufrir la falta de oxígeno.
Por esta razón los asistentes a las fiestas que usan helio para generar voces graciosas deben ser monitoreados, y si comienzan a desmayarse o perder el conocimiento deben ser tendidos en el suelo cuidadosamente para prevenir una lesión mayor.
Ruptura y hemorragia pulmonar
El helio es un gas inerte que se almacena en tanques de alta presión. Una de las situaciones más peligrosas asociadas con la inhalación de helio es que muchas personas lo hacen directamente de las boquillas de estos tanques.
Esto puede exponer a sus pulmones a un aumento repentino y violento de presión, provocando su ruptura o la hemorragia en sus vasos sanguíneos.
Este es un evento potencialmente mortal y debe ser tratado lo más rápido que se pueda.
Consideraciones
Las personas que inhalan solamente pequeñas cantidades de helio tienen poco que temer con respecto a un daño potencial a largo plazo causado por este proceso.
En general, el problema se limita al exceso en el uso de helio y la alta exposición al mismo, lo que puede generar problemas potenciales.
Incluso, el helio es aplicado como terapia medicinal en algunas enfermedades respiratorias.
Una de estas terapias, denominada Heliox, consiste en suministrar una mezcla de oxígeno y helio a pacientes afectados por enfermedad pulmonar obstructiva crónica.
El objetivo de esta terapia es aprovechar que el helio es más ligero que el aire y permite que la mezcla rica en oxígeno pase de forma más sencilla a través de las áreas obstruidas en los pulmones.
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Sin embargo, los pacientes sometidos a este tratamiento, son mantenidos bajo un minucioso monitoreo en el que se mide el nivel de gases en pulmones y sangre, así como cualquier otra complicación producida por la excesiva exposición al helio.
ADVERTENCIA: Este artículo no debe considerarse como un equivalente de una consulta médica profesional. Consulte a su médico de confianza ante cualquier duda sobre este u otro tema relacionado con su salud.