Actualizado en
18 julio, 2017
Los efectos de la inhalación de aire comprimido en la salud
El aire comprimido, conocido comúnmente como "removedor de polvo" en aerosol o "limpiador para computadora", se trata básicamente de un tipo de gas licuado que se introduce a presión en una lata de aerosol o pistola de aplicación. El aire comprimido contiene químicos como el tetrafluoroetano y el difluoroetano, que junto con el óxido nitroso, producen una fuerte sensación de euforia, similar al consumo de alcohol, cuando se inhalan. Hay muchos riesgos de salud involucrados con el uso inadecuado del aire comprimido y otros aerosoles similares.
Efectos a corto plazo
El aire comprimido produce un efecto similar al del consumo de bebidas alcohólicas. Los efectos en el cerebro se traducen en forma de mareos, falta de coordinación, euforia, pérdida de la atención y dificultad en el habla. Algunos consumidores también experimentan alucinaciones y delirio. Cuando el aire comprimido se combina con otros inhalantes, se puede presentar confusión severa, náuseas y dolor abdominal, vómitos e incluso pérdida del conocimiento.
Hipoxia
El aerosol "sacudidor" priva de oxígeno al cuerpo al remplazar las reservas de este gas vital en los pulmones. Esto se conoce como hipoxia. Las células en el cuerpo y el cerebro mueren cuando se produce la hipoxia, causando fallas de la memoria, pérdida de la audición y problemas de aprendizaje. La hipoxia prolongada causa daño cerebral irreversible.
Efectos sobre el sistema nervioso
La exposición a los aerosoles de aire comprimido eventualmente hace que la mielina, el tejido que rodea y protege los nervios, comience a descomponerse. La mielina ayuda a los nervios a transportar mensajes neurológicos desde el cerebro hasta el cuerpo. La disminución de la mielina provoca temblores y espasmos involuntarios, generando que la persona afectada desarrolle problemas de movimiento y del habla.
Efectos en los órganos
La exposición prolongada a ese tipo de productos puede causar tanto daño renal como enfermedad hepática. El daño renal conduce a una acumulación de toxinas en el cuerpo y la sangre. A menudo, los síntomas incluyen fatiga, falta de aliento, anemia y pérdida de apetito. Con el tiempo, el daño renal llega a acarrear problemas cardíacos, insuficiencia orgánica completa o coma total. Los síntomas más comunes de la enfermedad hepática incluyen debilidad, dolor abdominal, ictericia y pérdida de apetito. La enfermedad hepática avanzada, conocida como cirrosis, puede causar sangrado gastrointestinal, edema, coma o insuficiencia renal.
Efectos fatales
La mayoría de las personas que consumen aire comprimido perderían la conciencia mucho antes de inhalar una cantidad mortal, sin embargo, muchos de ellos podrían morir en lo sucesivo. La razón más común es la muerte súbita por inhalación, donde se presenta insuficiencia cardíaca inmediatamente después de la inhalación. En ocasiones, la persona corre el riesgo de morir de asfixia por hipoxia. Las probabilidades de muerte se incrementan cuando el aerosol se inhala dentro de una bolsa de papel o en área confinada con poca ventilación.
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