Dolores de cabeza por la abstinencia de carbohidratos

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No comas golosinas de azúcar cuando tengas hambre.
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Muy probablemente, tu dolor de cabeza no es causado por la abstinencia de los hidratos de carbono, sino más bien por la abstinencia de un tipo específico de éstos, el azúcar. Cuando comes una dieta alta en azúcar, tu cuerpo se ajusta rápidamente a un suministro de glucosa, fuente preferida de energía del cuerpo. Cuando el cuerpo no tiene el azúcar que necesita, puede experimentar bajos niveles de azúcar o hipoglucemia. Los síntomas de la hipoglucemia incluyen el hambre, dolor de cabeza y fatiga

Glucosa

Tu cuerpo utiliza la glucosa para obtener energía. Cuando comes, digieres especialmente rápido los carbohidratos como el azúcar y el almidón, estos alimentos se convierten en glucosa y se liberan en el torrente sanguíneo. El páncreas produce entonces la insulina para ayudar a transportar la glucosa desde la sangre a las células. La glucosa puede ser utilizada de inmediato para obtener energía, o almacenada en el tejido muscular y las células de grasa para uso posterior. Cuando no tienes un suministro de glucosa, puedes experimentar dolor de cabeza, ya que tu cuerpo puede utilizar la energía almacenada en los músculos o en la grasa mejor que el cerebro, el cual realmente prefiere la glucosa.

Regulación del azúcar en la sangre

Para evitar dolores de cabeza relacionados con el azúcar, trata de mantener tus niveles de glucosa estables. Algunas fluctuaciones son normales, especialmente antes y después de comer, pero si detienes el flujo rápido de glucosa que proviene del consumo de muchos hidratos de carbono simples, evitarás el choque inevitable de azúcar en sangre y dolor de cabeza que le sigue. Puedes mantener los niveles de glucosa estables comiendo pequeñas comidas frecuentes, cada tres o cuatro horas. Tanto la cantidad como la calidad de los alimentos importan, si esperas demasiado tiempo entre comidas, es posible que tengas tanta hambre que comerás más rápido y terminarás consumiendo demasiados alimentos.

Cambios en la dieta y el índice glucémico

No necesitas seguir una dieta baja en hidratos de carbono para evitar la hipoglucemia, pero sí es necesario elegir mejor los carbohidratos. Al comer carbohidratos complejos, ricos en fibra que incluyen frutas, verduras, legumbres y granos enteros, se reducirá la digestión y la conversión de los alimentos en glucosa. El índice glucémico es una tabla que clasifica los alimentos mediante su potencial impacto en el azúcar en la sangre, mientras más bajos sean los puntajes de los alimentos en el GI, menos efecto tiene sobre la glucemia. La mayoría de las opciones de carbohidratos debe tener 55 o menos en el GI.

La dieta y el dolor de cabeza

Cuando tu nivel de azúcar en la sangre baja, tu cuerpo comienza a utilizar la energía almacenada a la espera de un nuevo suministro de glucosa. Se liberan hormonas especiales que ayudan al cuerpo a convertir esta energía almacenada de nuevo en una forma utilizable. Estas hormonas contribuyen a tu dolor de cabeza, ya que pueden reducir los vasos sanguíneos y la presión arterial. Una vez más, mantener estables los niveles de azúcar en la sangre ayuda a prevenir que tu cuerpo libere las hormonas y previene los dolores de cabeza relacionadas con el azúcar.

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