Un quiste óseo está presente cuando una cavidad benigna en el hueso se llena de líquido. El tipo más común es el quiste óseo simple o unicameral. Esto ocurre generalmente en el brazo o el hueso del muslo de los niños entre las edades de 5 y 15. Otros quistes son el aneurismático, el ganglio epidermoide y el subcondral.

Un quiste óseo

1. Visita al médico. Muchos quistes se curan sin tratamiento. Hazte exámenes regulares y radiografías. Haz que el médico te explique las características de los diferentes tipos. Los quistes óseos aneurismáticos con mayor frecuencia afectan a las personas de 10 a 20 años de edad. Normalmente se encuentran en la columna vertebral o los huesos largos y están llenos de sangre. Un quiste epidermoide óseo se produce en el cráneo. Los tipos aneurismáticos y epidermoides se producen generalmente debido a un traumatismo. Un quiste de ganglio aparecerá alrededor de las articulaciones y tendones de las manos y los pies. Un quiste subcondral se produce al final de los huesos largos debajo de las articulaciones. Estas "bolsas cerradas" ocurren generalmente en pacientes con osteoartritis.

2. Limita el movimiento descansando o usando un yeso ligero. Quieres evitar una fractura.

3. Consulta a un cirujano ortopédico, si necesitas más tratamiento. Por lo general, el tratamiento se recomienda si hay un riesgo de fractura. El cirujano probablemente te recomendará un raspado e injerto óseo, inyecciones de esteroides o inyecciones de médula ósea.

4. Aprende cómo funciona el procedimiento. En el raspado e injerto óseo, el quiste se raspa con un instrumento especial llamado cureta. Se empaquetan tejidos de donante u hojuelas de hueso en la depresión resultante para reemplazar el líquido.

5. Establece con tu médico un programa de tratamiento diferente para un quiste óseo aneurismático. También puede ser tratado con el procedimiento de raspado y el injerto. Otra opción es hacer una incisión para extirpar el área afectada. El médico puede utilizar la crioterapia, que es un congelamiento quirúrgico del quiste o la radioterapia.

6. Programa la atención de seguimiento con tu médico. Dale tiempo al quiste para que sane. Con el uso de inyecciones de esteroides, la curación puede tardar de 6 a 12 meses.

   Advertencia

   Las fracturas son la complicación más frecuente de un quiste óseo. En ocasiones pueden regresar. Un quiste activo, que tiende a crecer, es más probable que regrese que un quiste latente. No tienen causas conocidas y por lo tanto, ninguna medida preventiva puede ser recomendada.