Furúnculos en las nalgas y los muslos

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Los furúnculos en los muslos y las nalgas son dolorosos y de color rojo.
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Los furúnculos pueden ser dolorosos y debilitantes, en especial si se desarrollan en zonas como las nalgas y los muslos. Pueden aparecer como bultos simples o agrupados formando carbuncos. Para tratarlos de la forma correcta y prevenirlos, es importante entender cómo y por qué se producen. Si tienes un furúnculo que persiste por más de dos semanas, empeora o es particularmente molesto, consulta a tu médico.

Síntomas

Los furúnculos pueden variar en tamaño desde el de un guisante a ser tan grandes como pelotas de golf. Pueden tener una punta amarilla o blanquecina que supura y se seca. La aparición de furúnculos puede estar acompañada de cierto tipo de síntomas que incluyen fiebre, cansancio, comezón, dolor, enrojecimiento e inflamación. Los furúnculos salen en cualquier parte de tu cuerpo, pero normalmente se producen en zonas expuestas a la fricción o al sudor, como tus muslos y nalgas.

Causas

Los furúnculos en muslos y nalgas se producen cuando los folículos pilosos de esas áreas desarrollan una infección bacteriana o micótica. Esta infección, generalmente causada por una bacteria estafilococo, entra en el cuerpo por un corte, un rasguño o un folículo dañado. Tu cuerpo reacciona combatiendo el cuerpo extraño con glóbulos blancos especiales llamados neutrófilos. Aunque éstos se deshacen de la infección, también causan síntomas como pus e inflamación, asociados con un forúnculo.

Tratamiento

Según el sitio web de MedlinePlus, los furúnculos deben ser drenados antes de que puedan sanar correctamente. Aunque este proceso por lo general ocurre por sí solo, puedes aplicar una compresa tibia húmeda sobre el área muchas veces al día para acelerarlo. Esto estimula el drenaje y disminuye la inflamación. Los furúnculos crónicos, profundos o grandes que duren más de dos semanas deben ser drenados quirúrgicamente por un médico. Abstente de apretar o tocar un furúnculo; esto puede producir una cicatriz severa o una infección.

Prevención

Para prevenir que se desarrollen furúnculos, MayoClinic.com aconseja lavar tu piel con frecuencia con un jabón suave o a base de alcohol. Si tienes un corte abierto, aplica un ungüento antibiótico para matar cualquier bacteria en la superficie y en la herida. Mantén los cortes o rasguños limpios y cubiertos con vendas secas esterilizadas. Nunca compartas artículos personales como toallas, ropa, ropa de cama o equipamiento atlético, en especial si tú o alguien más tienen una herida abierta. Los hongos, bacterias e infecciones pueden extenderse fácilmente a través de este tipo de objetos.

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