Actualizado en
23 diciembre, 2017
Cómo tratar los cornetes inflamados
Los cornetes nasales son responsables de limpiar y humidificar el aire mientras este se desplaza desde la nariz hacia los pulmones. Algunas personas sufren inflamación cuando entran en contacto con un alérgeno, que desencadena una reacción inflamatoria. Relájate: tener los cornetes inflamados no es tan escalofriante como suena. Hay algunas cosas que puedes hacer para sentirte mejor, instantáneamente.
Los cornetes son proyecciones óseas ubicadas a ambos lados de la cavidad nasal. Normalmente hay tres: el cornete inferior (que es el más grande y se ubica cerca de la fosa nasal), el cornete medio (el segundo en tamaño) y el cornete superior (el más pequeño). Los cornetes filtran el polvo y las partículas expandiéndose y contrayéndose regularmente, normalmente dos veces al día: una vez a la izquierda y otra a la derecha. Este proceso es completamente normal y la mayoría de las personas no nota.
Cuando una persona entra en contacto con algo a lo que es alérgico, como el polen de los árboles, el cuerpo trata a esta sustancia como un invasor extraño. Esto puede provocar una reacción que inflama los cornetes. Sin embargo, los alérgenos no son los únicos responsables de estos problemas nasales. Las personas sensibles (pero no alérgicas) a la polución o al polvo del aire también pueden sufrir inflamación de los cornetes. Cuando esto ocurre, podría dar como resultado una obstrucción de los conductos nasales, normalmente denominado congestión nasal, que es un síntoma común de alergia.
Un tratamiento común para la inflamación de los cornetes es el Nasonex, un medicamento de venta bajo receta usado para tratar los síntomas de alergia nasal. También pueden funcionar las gotas de solución salina y los corticoides nasales. Tal vez una de las formas más simples de solucionar el problema sea darte una ducha caliente; el vapor puede ayudar a aliviar la inflamación de los cornetes. Pero evita el sauna: el aire seco agrava el problema.